3 de octubre de 2008

San Martín


(c/. Desengaño, 26)

Sus orígenes se remontan al año 1126, cuando es fundado como un convento benedictino. Originariamente estuvo emplazado en la plaza del mismo nombre, frente a las Descalzas Reales. En el siglo XIV, el convento se transformó también en parroquia y llegó a convertirse en la más importante de Madrid.
En 1809, José Bonaparte derribó la iglesia del convento y la parroquia estuvo deambulando por diversas iglesias, hasta que los decretos desamortizadores de 1836, obligaron su traslado definitivo a su emplazamiento actual, ocupando el antiguo convento de Portacoeli que había sido fundado en 1644, y que se encontraba vacío tras la exclaustración de los frailes.
Se puede considerar como un magnífico ejemplo del barroco madrileño de la segunda mitad del siglo XVII. Se cree que fue construido por el Padre José de Valdemoro entorno a 1648. Levantado sobre una planta de cruz latina, destaca la portada, atribuida a los Churriguera. En los últimos años ha sido cedida para la celebración del culto de la comunidad polaca de Madrid, por lo que dicha parroquia también es conocida como la “Iglesia de los polacos”.



27 de septiembre de 2008

Plaza de Canalejas 1


Banco Santander
(Antiguo Banco Hispano Americano)


Proyecto realizado en 1902 por el arquitecto Eduardo de Adaro Magro, arquitecto también del Banco de España. En su construcción, que se prolongó de 1902 a 1905, se repiten pautas que aparecen en el Banco de España, como el patio de la planta baja. El edificio, en el que también intervino Salaberry, consta de planta baja y cuatro alturas repartidas en una fachada principal a la plaza de Canalejas y en otras dos fachadas laterales. Adaro se inclina, en la decoración de las fachadas, por la simetría y por los recursos clásicos: pilastras, semicolumnas, entablamentos, frontones curvos, ménsulas, molduras y dos esculturas en el primer piso flanqueando los ángulos superiores de la puerta principal.

21 de septiembre de 2008

Plaza de Canalejas 3


Casa Allende

También conocida como edificio Credit Lyonnais.El edificio promovido por D. Tomás de Allende, fue construido como edificio de viviendas entre 1916 y 1920, según proyecto de los arquitectos Leonardo Rucabado Gómez, Ramiro Saiz Martínez y Pedro Cabello Maíz y decorado con cerámicas del taller de Zuloaga. Típico edificio de la arquitectura que surge a partir de la crisis de 1898, en este caso, de la arquitectura santanderina.Compuesto por planta baja, entresuelo, dos viviendas por planta y otra en el ático con torreón de esquina. Destaca sobre todo la solana montañesa en la fachada de la Carrera de San Jerónimo.

14 de septiembre de 2008

Plaza de Canalejas 4


Edificio Meneses

En 1914 la viuda del financiero Meneses encargó la construcción de un edificio de viviendas con áticos a los arquitectos D. José María Mendoza y Ussía y a D. José de Aragón Pradera, en un pequeño solar que había en la plaza de Canalejas esquina a la calle del Príncipe, frente al monumental Banco Hispano Americano.
La escasez de dicho solar, obligó a los arquitectos a elevar la altura del edificio y así aparentar una mayor verticalidad, lo que consiguieron por medio de semicolumnas clásicas, entrelazadas con miradores de hierro y cristal, una balaustrada en el piso superior y un templete circular en la esquina sostenido por un tambor encolumnado coronado por una cúpula.

7 de septiembre de 2008

Plaza de Canalejas 5


Uno de los cafés más bonitos y con más encanto de Madrid, que aún perdura, de los numerosos establecimientos de este tipo que había en la capital: Café del Príncipe conocido como el Parnasillo, el Café Nuevo, el Café de la Iberia, el Café del Prado... Se hizo famoso por haber sido lugar de encuentro a partir de 1829 de escritores del Romanticismo, como Espronceda, Ventura de la Vega, Larra y Mesonero Romanos; los dramaturgos Hartzenbusch, Zorrilla y el poeta Enrique Gil y Carrasco; oradores como Fermín Caballero, Salustiano de Olózaga, Bravo Murillo y Donoso Cortés; pintores como Madrazo, Rivera, Esquivel y Villaamil; y grabadores como Deleguer, Castillo y Ortega; y el empresario teatral Juan Grimaldi, actores y jóvenes literatos. Larra lo describió como «reducido, puerco y opaco».